Unidos en la Convención General de IAFCJ y AAFCJ
En una histórica reunión celebrada en Monterrey, México, líderes y miembros de la Iglesia Apostólica de la Fe en Cristo Jesús (IAFCJ) y la Asamblea Apostólica de la Fe en Cristo Jesús (AAFCJ) se han unido en una demostración de hermandad y unidad cristiana.
Bajo el lema "Unidos en el Poder del Espíritu Santo", el evento reunió a más de cinco mil participantes, incluyendo a destacados líderes como el Obispo Samuel Sánchez de la IAFCJ y el Presidente Fortino Reyes de la AAFCJ. Ambos líderes destacaron la importancia de dejar atrás diferencias pasadas y trabajar juntos para expandir el Evangelio de Jesucristo.
El Obispo Samuel Sánchez expresó durante su intervención: "Hemos comprendido que ha llegado el tiempo de practicar la más elevada ética ministerial. Bajo estas administraciones, la era de prosélitos, líderes y miembros ha terminado en el nombre del Señor Jesucristo. No necesitamos robar miembros; hay muchas almas que necesitan oír lo que tenemos. Cualquiera que quiera ser parte de la asamblea apostólica deberá tener la referencia de sus líderes anteriores antes de ser aceptados. No competiremos por miembros, sino que nos uniremos para llevar el mensaje de salvación a quienes lo necesitan".
La era de prosélitos, líderes y miembros ha terminado en el nombre del Señor Jesucristo. No necesitamos robar miembros; hay muchas almas que necesitan oír lo que tenemos. Cualquiera que quiera ser parte de la asamblea apostólica deberá tener la referencia de sus líderes anteriores antes de ser aceptados.
El evento no solo fue un espacio para discursos y enseñanzas, sino también para la celebración de la amistad y la reconciliación. Antiguos líderes como el ex Presidente Eliezer Reyes de la IAFCJ y el Secretario General Félix Gaxiola de la AAFCJ estuvieron presentes, subrayando el compromiso de ambas iglesias de restaurar relaciones y avanzar juntas en el propósito común de servir a Dios y a la comunidad.
La Convención General no solo fortaleció los lazos entre las dos denominaciones, sino que también sirvió como un recordatorio del papel crucial de la unidad dentro del cuerpo de Cristo. Los participantes fueron desafiados a vivir de acuerdo con el llamado de Jesucristo a la unidad y el amor fraternal.
Concluyendo el evento, el Presidente Fortino Reyes afirmó: "La idea no es interferir en los asuntos del otro, sino amarnos y respetarnos mutuamente. Juntos, en el poder del Espíritu Santo, podemos alcanzar mucho más para el Reino de Dios".
La unión histórica entre la IAFCJ y la AAFCJ en esta Convención General ha sentado un precedente significativo en el movimiento evangélico, demostrando que la división puede ser superada cuando se prioriza el amor cristiano y la unidad en la fe.
