Cómo luchar por la libertad religiosa y enfrentar la discriminación como cristiano estadounidense
Conozca la historia de un hombre que defendió sus creencias cristianas y su libertad religiosa en medio de ataques legales que llegaron a la Corte Suprema y cómo hacer su parte.
Respondiendo a las amenazas contra la libertad religiosa
Como creyentes cristianos estadounidenses, es esencial defender la libertad religiosa frente a las crecientes amenazas y persecución. La historia de Jack Phillips, propietario de Masterpiece Cake Shop en Lakewood, Colorado, sirve como un poderoso recordatorio de la importancia de defender nuestra libertad religiosa. Phillips, un cristiano profesante, ha sido demandado, multado, amenazado y acosado por negarse a crear pasteles personalizados que expresan mensajes contrarios a sus creencias cristianas. A pesar de su victoria en la Corte Suprema de Estados Unidos, continúa enfrentándose a acciones legales.
Entendiendo el caso de Jack Phillips
Es crucial comprender los detalles del caso de Phillips para apreciar la importancia de su lucha. Como panadero, atendería a todos los clientes, independientemente de su orientación o identidad sexual. Tenía amigos y clientes que eran homosexuales y les atendía sin problemas. Sin embargo, se negó a hornear un pastel para una boda entre personas del mismo sexo, lo que llevó a una batalla legal. No se trataba de un caso de discriminación por orientación sexual, sino más bien de una negativa a respaldar una ceremonia que iba en contra de sus creencias religiosas.
La importancia de defender la libertad religiosa
Debemos defender la libertad religiosa, la libertad de expresión, la libertad de reunión, la libertad de prensa y la libertad de adorar a Dios. Es esencial reconocer que la libertad religiosa no se trata sólo de creencias personales, sino también de la libertad de expresar esas creencias sin temor a persecución. En Estados Unidos tenemos la oportunidad de ejercer nuestra voluntad y expresar nuestras opiniones mediante el voto, que es un aspecto crucial de la democracia.
Oración, votación y apoyo a la acción política
Entonces, ¿cómo podemos responder a las amenazas contra la libertad religiosa? Primero, debemos orar para que Dios intervenga y cambie los corazones de las personas. En segundo lugar, debemos votar y participar en el proceso democrático. En tercer lugar, podemos apoyar acciones políticas que protejan la libertad de expresión y la libertad religiosa. Si bien la iglesia debe mantener su independencia y no respaldar candidatos o partidos políticos específicos, los creyentes individuales pueden participar en campañas y apoyar políticas que se alineen con sus valores.
Establecimiento de redes y asociación con otros
Como iglesia, debemos trabajar en red con otros que comparten nuestro compromiso con la libertad religiosa, incluso si no estamos de acuerdo en la doctrina. Podemos y debemos involucrarnos en el proceso político, defendiendo nuestros valores morales y abogando por políticas que apoyen la libertad religiosa. La Iglesia Pentecostal Unida Internacional (UPCI) ha respaldado la Conferencia Nacional de Liderazgo Cristiano Apostólico (NALC), que proporciona una plataforma para que iglesias e individuos unan sus recursos y aboguen por políticas que apoyen la libertad religiosa.
Acceso a la protección legal
La NALC se ha asociado con Alliance Defending Freedom (ADF), un grupo conservador de abogados cristianos especializados en protección legal y defensa de la libertad religiosa. Cuando una iglesia se une a la NALC, automáticamente se convierte en miembro de la ADF sin costo adicional, obteniendo acceso a protección y recursos legales. Actualmente, la ADF está defendiendo a Jack Phillips en su nuevo caso legal y, al apoyar a la NALC, estamos brindando recursos para ayudar a defender sus derechos y los de otros creyentes que enfrentan persecución.
Ampliando las protecciones en todo el mundo
Mientras nos esforzamos por defender la libertad religiosa en los Estados Unidos, también debemos reconocer la importancia de extender protecciones similares en todo el mundo. Si nos unimos y defendemos la libertad religiosa, podemos lograr un impacto significativo y promover una cultura de tolerancia y respeto por todas las creencias.
