Noticias de última hora

LA FE


fe

"Es pues la fe, la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve" (Hebreos 11:1).

Hay muchos conceptos o definiciones respecto a la fe, se puede definir como la firme convicción de que algo es verdad, por la absoluta confianza que hemos depositado en algo o alguien.
Según el diccionario, fe es la creencia confiable en la verdad, la validez o seriedad de una persona, idea o cosa. Según la Biblia: la fe es la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Es dar por hecho lo que todavía no lo es.

Se preguntara usted ¿Qué cosa es la certeza? La certeza es una calidad de cierto, un conocimiento seguro y evidente de que algo es cierto. El hombre de fe vive en certeza porque  sabe  que lo que espera vendrá.  Sabe que Dios no miente, y si él prometió algo lo va a recibir. Con respecto al futuro utiliza el término griego “Hupostasis” (certeza) que significa estar abajo, apoyo. Todo lo que pedimos a Dios debemos tener esa certeza que vamos a recibirlo, el no miente: “Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que se arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? ” (Números 23:19).

 El texto de Hebreos también dice que la “Fe es Convicción de lo que no se ve” ahora hagámonos la pregunta ¿Qué es la convicción? Del latín convictĭo, la convicción es el convencimiento que se tiene sobre algo.  Se dice que convicción es convencimiento de algo. Es también, una idea fuertemente adherida a la persona. La gente suele decir: “Si no veo no creo”, el Señor nos dice “Bienaventurado los que sin ver creyeron” ¿Por qué bienaventurados? porque si crees sin ver vas a ver lo que crees, y todos nos ponemos felices cuando recibimos cosas. «Si algo pidiereis en mi nombre, yo lo haré» (Juan 14:14). Si nos consideramos cristianos, probablemente digamos que oramos y pedimos en el nombre de Jesús. Sin embargo, ¿quiénes podrían sugerir que, al hacerlo, obtenemos todo lo que pedimos? Pues la convicción o el convencimiento que tenemos en él.

Como dice Romanos 4:18-21 hablando de Abraham: “El creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de muchas gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu descendencia. Y no se debilitó en la fe al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (siendo de casi cien años), o la esterilidad de la matriz de Sara. Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios, plenamente convencido de que era también poderoso para hacer todo lo que había prometido”
“El creyó en esperanza contra esperanza, a fin de llegar a ser padre de muchas naciones, conforme a lo que se le había dicho: así será tu descendencia. Y sin debilitarse en la fe contempló su propio cuerpo, que ya estaba como muerto puesto que tenía como cien años, y la esterilidad de la matriz de Sara;  sin embargo, respecto a la promesa de Dios, Abraham no titubeó con incredulidad, sino que se fortaleció en fe, dando gloria a Dios, y estando plenamente convencido de que lo que Dios había prometido, poderoso era también para cumplirlo.”

Cuando en texto de Hebreos habla “de lo que no se ve” o de lo invisible, utiliza “Elenchos” (convicción) persuasión, reprender, se traduce también redargüir: “… útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicas” (2 Timoteo 3:16).  Todo esto no indica que  la fe es el resultado del oír y/o recibir el evangelio de la gracia de Dios. "Por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios. Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por medio de la muerte de su hijo, mucho más estando reconciliados, seremos salvos por su vida, pues si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinará en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia" (Romanos 5:2, 10,17)…. “Y por quien recibimos la gracia y el apostolado, para la obediencia a la fe en todas las naciones por amor a su nombre”  (Romanos 1:5).

La fe genuina, la fe que resulta y nos lleva a la solución de cualquier problema, situación adversa, etc.  Es la que ponemos en el señor Jesús.

Ahora tú te preguntaras  ¿Cómo se Obtener esta fe? Querido lector se requiere un proceso en nosotros. ¿Cuál es ese proceso? Pablo lo explica así: “Así que la fe es por el oír, y el oír, por la PALABRA DE DIOS.”  (Romanos 10:17).

Sin fe No se puede Agradar a Dios:

“Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan.” (Hebreos 11:6).

“Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿Podrá la fe salvarle?” (Santiago 2:14).

La Biblia afirma que Abraham es el Padre de la fe, dice Pablo: “Por la fe
Abraham,  siendo llamado, obedeció para salir al lugar que había de recibir como herencia; y salió sin saber a donde iba. Por la fe  habitó como extranjero en la tierra prometida como en tierra ajena, morando en tiendas con Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa.” Aquí vemos que la fe de Abraham se tradujo en obediencia a Dios. Él creyó lo que Dios le dijo, sin aún ver la tierra prometida y las bendiciones futuras. Él dejó su casa y amigos en Ur de Caldea y partió hacia la tierra prometida. Su fe lo llevó a la acción, a las obras.

Avanzar es fe: “Y si retrocediese no agradará a mi alma” (Heb10:38).  Como le paso a Pedro el comenzó a caminar sobre las aguas, pero su fe le fallo, por la sencilla razón de estar atemorizado, cuando en nuestra vida existe el temor, el miedo, este no nos dejara a avanzar y la consecuencia es que nos hundiremos completamente. Esto no le agrada a Dios. Dios nos invita a todo Cristiano es a que tengamos siempre ánimo, no importa cuán grande sea el problema amigo y hermano tengamos siempre ánimo, estemos convencidos de que Dios nos va ayudar, si caminamos con Dios, nuestro andar será seguro:

¨porque todos le veían, y se turbaron. Pero en seguida habló con ellos, y les dijo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis!¨ (Marcos 6:49).

¨Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: ¡Un fantasma! Y dieron voces de miedo. Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: ¡Tened ánimo; yo soy, no temáis! Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas. Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús. Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame! Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?¨ (Mateo14:26-31).

Todo aquel que intente retroceder tenga la plena seguridad que se hundirá y esto no le agradara a nuestro señor Jesucristo. Usted dirá yo soy un hombre o mujer de fe, pero yo le digo ¿Tendrás fe cuando venga el fuerte viento, cuando vengan las dudas y los problemas y las persecuciones, cuando falte un proyecto de vida como discípulos? Si usted no retrocede lo considerare un hombre o mujer de fe, pero si se deja dominar por la duda o el miedo, se hundirá o retrocederá.

Retroceder es incredulidad. La persona de fe va a avanzar, nunca va a ir hacia atrás. Ahora te hago la siguiente pregunta: ¿Hallara Jesús fe en la tierra cuando vuelva? Veamos lo que nos dice las sagradas escrituras:

“Os digo que pronto les hará justicia. Pero cuando venga el Hijo del Hombre, ¿hallará fe en la tierra?” (Lucas 18:8).

“Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre.” (Mateo 24:38-39).

“También debes saber esto: que en los postreros días vendrán tiempos peligrosos. Porque habrá hombres amadores de sí mismos, avaros, vanagloriosos, soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, impíos, sin afecto natural, implacables, calumniadores, intemperantes, crueles, aborrecedores de lo bueno, traidores, impetuosos, infatuados, amadores de los deleites más que de Dios, que tendrán apariencia de piedad, pero negarán la eficacia de ella; a éstos evita. ” (2 Timoteo 3:1-5).

“Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.” (Mateo 7:22,23).

“sabiendo primero esto, que en los postreros días vendrán burladores, andando según sus propias concupiscencias, y diciendo: ¿Dónde está la promesa de su advenimiento? Porque desde el día en que los padres durmieron, todas las cosas permanecen así como desde el principio de la creación. ” (2 Pedro 3:3,4).

Habrá en los postreros tiempos muchos incrédulos y muchos se perderán,  les insto que sigamos manteniendo nuestra de en nuestro Dios y salvador Jesús. Él es nuestro mejor ejemplo de fe:

“Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús.” (Apocalipsis 14:12).

“Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas” (1Pedro 2:21).

Si su fe es poca todavía, sea sincero con Dios y consigo mismo y pídale como el padre del muchacho endemoniado: “Señor, ayuda mi incredulidad”  (Marcos 9:24).

Mi Dios Jesús les siga bendiciendo

Pastor  Fredy Delgado