La malas actitudes contagian
Texto clave: "Si en la tierra hubiere hambre, pestilencia, tizoncillo, añublo, langosta o pulgón; si sus enemigos los sitiaren en la tierra en donde habiten; cualquier plaga o enfermedad que sea; toda oración y toda súplica que hiciere cualquier hombre,
o todo tu pueblo Israel, cuando cualquiera sintiere la plaga en su corazón, y extendiere sus manos a esta casa, tú oirás en los cielos, en el lugar de tu morada, y perdonarás, y actuarás, y darás a cada uno conforme a sus caminos, cuyo corazón tú conoces (porque sólo tú conoces el corazón de todos los hijos de los hombres);"
1 Reyes 8:37-39.
¿Que es la actitud?
Es la manera de estar alguien dispuesto a comportarse u obrar.
Es la postura del cuerpo que revela un estado de ánimo.
Son muchas las personas que viven quejándose de su mala situación, enfermedad o plaga en su corazón.
Su modo de actuar será de acuerdo a su situación sino tiene el conocimiento del amor de Dios.
Pues, a los que aman a Dios todas las cosas le ayudan para bien y no para mal, la biblia dice: "Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados." Romanos 8:28.
Toda situación que estés pasando es para bien, no es para que te estés contagiando con malas ideas de maldición, de desesperanza y de mala actitud, contagiando a los demás, con tu mal comportamiento porque todo te ha salido mal, porque nadie te quiere o porque crees que tú enfermedad o problemas no tienen solución, la biblia dice: "No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar. Por tanto, amados míos, huid de la idolatría." 1 Corintios 10:13-14.
Por eso es importante que en los problemas que puedas tener debes esperar en Dios y no contagiarte de nuevo a buscar la solución en el nombre de otro dios, brujería, urguentos o baños de suerte, porque sería idolatría. No creas que Dios no te escucha, no te contagies de este negativismo, Dios está esperando que le busques, lo que pasa es que según sea tu proceder, así será tu pago.
Dios dará a cada uno según sea su modo de actuar, si usted levanta sus manos a Dios, el te dará la solución, el escuchará la súplica de tu problema y actuará, la biblia dice: "toda oración y toda súplica que hiciere cualquier hombre, o todo tu pueblo Israel, cuando cualquiera sintiere la plaga en su corazón, y extendiere sus manos a esta casa, tú oirás en los cielos, en el lugar de tu morada, y perdonarás, y actuarás, y darás a cada uno conforme a sus caminos, cuyo corazón tú conoces (porque sólo tú conoces el corazón de todos los hijos de los hombres);"
1 Reyes 8:38-39.
No te dejes contagiar del negativismo de la situación que estés viviendo, no contagies con la mala actitud a los demás, dice una reflexión:
Fui a predicar a una isla y me hospedaron en un pequeño pero bonito hotel. Al rato cuando voy a recepción, detrás del mostrador había una señora con cara de "suegra con yerno pobre", y con mucha amabilidad le pedí la clave del wifi, a lo que ella con un tono muy áspero me respondió: "Aquí alquilamos habitaciones, no servicio de internet, si usted quiere internet váyase al ciber café de la esquina".
Pero en el lobby y en el hotel habían varios letreros que decían "Free Wifi"… Al otro día vuelvo a recepción y me atiende otra vez la misma señora con cara de limón; le pido la clave y me dice: "Estoy muy ocupada… después que vaya al restaurante, buscaré esa clave"… Se fue al restaurante y yo me quedé esperando muuuuuucho tiempo. Finalmente, la señora regresó y sorprendida de que yo estaba ahí todavía, me dijo: "¿Todavía aquí? ¡Que fastidio! ". Y de muy mala gana me dio en un pedazo de papel la clave del wifi…
¡Yo no soy un ángel! Y como tampoco sudo ¨agua bendita¨, llegué a mi habitación lleno de indignación y mucha rabia. En mi cólera a causa de su maltrato, empecé a maquinar que debía dirigirme al administrador o dueño para reportar la mala actitud de esa empleada… y si yo tenía suerte, pues a ella la despedirían de su trabajo. Pero orando sentí reprensión, me revestí de Cristo y cuando salía pasé por la recepción y le dije a la señora:
"Soy un predicador del Evangelio de JESÚS , predico Amor, Perdón y Reconciliación. Así que, no sé qué impresión le di, pero algo está mal entre nosotros, y no sé cómo o cuándo la ofendí, pero vengo a pedirle perdón".
La señora empezó a llorar y en sollozos me dijo (algo que me marcó para siempre) lo siguiente: "Usted no hizo nada malo, no tiene la culpa. Lo que pasa es que soy la dueña de este hotel (y yo que pensé que era una empleada) y tengo muchos problemas, estoy super estresada… Tengo problemas económicos, en el hogar, de salud, con los hijos… Estoy muy mal, muy sobrecargada y ni siquiera me doy cuenta de lo que hago y digo mal…"
Oramos juntos mientras ella se desahogaba llorando.
#Moraleja: Las malas actitudes son siempre sólo una válvula de escape y el reflejo de nuestro interior dañado.
●Las personas que se sienten maltratadas, maltratan a los demás.
●Las personas heridas, son hirientes.
●Las que se sienten humilladas, son humillantes.
●Muchos enojados, sólo están enojados con ellos mismos...
Pues cada uno da de lo tiene, cada uno saca del corazón lo que atesora.
Así que, cuando te encuentres a alguien con mala actitud, enojado, ofensivo, hiriente y humillante, no reacciones en su misma condición. Comprende que detrás de esa mala actitud hay una historia de dolor, un corazón con falta de amor...
Rompe el círculo vicioso, perdona, sanate, ama y bendice en el nombre de JESÚS.
Enséñale que los oídos de Dios están dispuestos a escucharlo y a sanar sus heridas. Solo tienes que levantar sus manos a él y él hará.
Refugiarse en Dios es la solución y no en tu mala actitud, la cual contagiará a los demás.
Mi Dios y salvador Jesús te bendiga